Los microservicios son una arquitectura de software que organiza una aplicación como un conjunto de servicios pequeños e independientes. Cada microservicio se centra en realizar una única tarea o función dentro del sistema y se comunica con otros microservicios a través de interfaces de programación de aplicaciones (APIs).

Ejemplos de Microservicios Autenticación y Autorización: Un microservicio que gestiona la autenticación de usuarios, generando tokens y manejando la autorización para acceder a diferentes partes de la aplicación. Gestión de Usuarios: Un microservicio dedicado a las operaciones relacionadas con los usuarios, como la creación de perfiles, la gestión de contraseñas, y la actualización de la información del usuario. Carrito de Compras: En una aplicación de comercio electrónico, un microservicio puede encargarse exclusivamente de la gestión del carrito de compras, incluyendo agregar o eliminar productos, y calcular los totales.

Recomendaciones: En una plataforma de streaming, podría haber un microservicio dedicado a generar recomendaciones personalizadas basadas en el comportamiento del usuario. Cada uno de estos microservicios puede ser desarrollado, desplegado y escalado de manera independiente, lo que permite una mayor flexibilidad y agilidad en el desarrollo de software.